La
fotografía y el modo de entenderla es diferente para cada persona. No todos tenemos las mismas necesidades y esto significa que no todos necesitamos la misma cámara. Hay muchas posibilidades a la hora de adquirir nuestra primera cámara y muchos consejos a tener en cuenta que
debemos analizar, para hacer una compra satisfactoria. Desde
En Foto, nos gusta orientaros con estos temas y es por eso que os vamos a contar que cámara encaja mejor con cada necesidad.
En principio nos encontramos con tres grandes grupos de aficionados a la
fotografía y por tanto tres cámaras diferentes para cada tipo de persona. Estos se separan sobretodo por el nivel de involucración que se tiene con la
fotografía: el tiempo que le dedicamos y lo que aspiramos a hacer con la
máquina. No es lo mismo que necesitemos hacer pósters para una empresa de muebles que fotos cuando salimos de fiesta para subirlas al facebook.
Se podría decir que hay tres tipos de cámara, encaminados a estos tres grupos de personas. Los fabricantes se centran en las necesidades y en cualquier tienda podemos encontrar cámaras para principiantes o gente que está comenzando a hacer fotos, cámaras para el
aficionado intermedio con más prestaciones y posibilidades y las
cámaras profesionales.
Las
cámaras que utilizan las personas que están comenzando a hacer fotos son las
cámaras compactas. Estás cámaras tienen todas casi todas sus funciones automáticas, aunque siempre habrá unas cuantas variables que podremos manejar: el
zoom, el uso o no de
flash o el
ISO. Estás cámaras son perfectas para familiarizarnos con los conceptos, jugar con las imágenes y experimentar. Además debido a su reducido peso y tamaño se convertirán en inseparables compañeras.
Dentro de las máquinas
digitales compactas, existen unas
cámaras puente destinadas a entrelazar esta modalidad de cámara y la siguiente: las cámaras para el
aficionado intermedio o semiprofesionales, que no son tan económicas pero permiten empezar a controlar otros parámetros como el
diafragma o la
velocidad. Suelen resultar la segunda compra de las personas que empiezan a hacer imágenes y el salto definitivo hacia el siguiente tipo de
cámara.
El siguiente tipo de
cámara son las cámaras
semiprofesionales, éstas permiten ya el control total de todos los parámetros necesarios para realizar una
fotografía:
ISO,
diafragma,
velocidad y uso o no de
flash,
temperatura del color, etc. No son tan ligeras como las anteriores pero su peso tampoco es significativo. Suelen llevar el
flash incorporado y realizar imágenes de
alta calidad. Se tratan de
cámaras destinadas a personas cuya mayor pasión es la fotografía y que aunque no quieren dedicarse de un modo profesional si quieren grandes resultados. Su precio es intermedio y sin duda es una gran relación calidad precio.
Por último tenemos las
cámaras profesionales, son las menos económicas, rondando la más barata los 1900 euros. Los
objetivos y
accesorios de estas cámaras, son más caros porque su uso es para personas que trabajan en la
fotografía. La complejidad de uso es mayor pero los resultados son inigualables, algunas aportan una calidad parecida a las cámaras de
medio formato. El
flash siempre es externo y permiten las
copias de gran tamaño.
Esperamos que estas explicaciones os hayan orientado un poco más a la hora de elegir cámara. Pronto os pondremos ejemplos de cada tipo de cámara, para que sepáis que modelos corresponden a cada categoría.
¡Feliz Domingo!