Aprovechando que muchos de nosotr@s estamos de vacaciones, hoy nos iremos a dar un paseo por el campo. En España hay muchos caminos y senderos señalados para caminantes, que nos llevarán a lugares increíbles por su belleza, lugares a los que normalmente no podríamos acceder con vehículoCargados con nuestra
cámara y nuestro
trípode, protegida la cabecita con un bonito sombrero de los ardores del sol nos adentraremos por la orilla de un río, por supuesto durante las primeras horas de la mañana, para aprovechas los rayos inclinados de la luz solar.
Fijémonos en la fauna y en la flora del lugar. Durante la excursión, aparte de disfrutar de la naturaleza, nos iremos fijando en el
comportamiento de la
luz. Si miramos en dirección al sol, nos daremos cuenta que los
colores son mucho más
brillantes, literalmente. Las hojitas de los árboles brillan como iluminadas con luz propia, así como el agua, tan transparente que nos deja ver el fondo.
En cambio, si miramos con el sol en la espalda, los
colores pierden su gracia y se vuelven más
opacos. No obstante, es cuestión vuestra decidir.
Espero que no tengáis miedo a la arañas. Son un buen motivo para fotografiar, ahí, en medio de su red, a la espera de que caiga algún bichito. Dejar que la luz se refleje en la red para hacerla visible, ya que en determinados ángulos es prácticamente invisible. En la imagen destacada, una simpática babosa busca refugio debajo de una hojitas.
Hoy también
fotografiaremos la flora, a contraluz,
sin flash, aprovechando que hay una
buena luz ambiente.
Para aumentar la
profundidad de campo, que suele ser escasa cuando usamos el
objetivo ?macro?, cerraremos el
diafragma como mínimo a 11, dejando que la máquina calcule la
velocidad. Luego haremos 2 fotografías mas, una
subexponiendo 2/3 de diafragma y otra
sobreexponiendo 2/3. (Esto solo es una idea, vosotr@s podéis modificar estas indicaciones según vuestra experiencia)
De este modo podremos escoger posteriormente la que más nos guste.
En las fotos de paisaje cuida que haya una correcta distribución entre luces y sombras. Si ves que el
fotómetro de tu cámara se va a dejar engañar por una zona del paisaje demasiado luminosa, (rayos de sol que penetran por las hojas), pues a
sobreexponer como acabamos de explicar, para poder sacar detalles de las zonas más oscuras.
Si usas una
cámara digital, no te cuesta hacer varios disparos de prueba, y comprobar el resultado en la pantallita.
Y déjate llevar por tu intuición a la hora de encuadrar un paisaje. Una visita previa a un museo te enseñará a componer tal como lo haría un verdadero artista.