Ya se acerca con cautela esa época del año en la que las calles se abarrotan de gente y de luces, las cenas familiares se vuelven algo habitual y los villancicos suenan por todas partes. Desde este blog vamos a intentar daros unas ideas navideñas que
fotografiar, para sacarle el máximo partido a esta época.
Decoración navideña
Para ello vamos a contaros cuales son los motivos más llamativos y algunos consejos técnicos a la hora de abarcarlos. Podemos llevar nuestra
cámara con nosotros durante las compras navideñas, hacer una gincana
fotográfica con algún amigo o simplemente practicar en un paseo en solitario.
Los escaparates son uno de los puntos fuertes de las navidades. Las empresas grandes o pequeñas sacan a relucir sus mejores galas a través de ellos. Nieve falsa, árboles gigantes, reyes magos parlantes y otras simpáticas figuras nos esperan.
Es importante pasear, conocer. Un
fotógrafo no puede hacer fotos sin esta premisa. Una vez tengamos identificado el escaparate que queremos retratar nos enfrentaremos a algunas dificultades técnicas.
Reflejos y
luz insuficiente serán las más habituales. Para la luz insuficiente, debemos utilizar un
trípode que nos permita utilizar
velocidades lentas. El tema de los
reflejos es más complicado: podemos valernos de una cartulina negra y alguien que nos ayude para eliminarlos, cambiar el punto de vista desde el que disparamos o esperar a otra hora del día para fotografiar.
Las
luces, es dentro de los elementos característicos de la navidad el más fotográfico. Pueden ser luces sobre las calles, en los árboles que adornan las tiendas, las casas. La luz es un elemento maravilloso que bien utilizado jugará a nuestro favor de una manera fantástica.
Lo mejor será
fotografiarlas de noche, de ese modo resaltaran más. Para
fotografiar luces tenemos la posibilidad de utilizar
velocidades lentas (con la ayuda de un
trípode) que recogerán todo el rastro luminoso que provoquen. O
velocidades rápidas que congelaran los colores como si fueran luciérnagas en el cielo.
En ambos casos un
ISO alto jugará a nuestro favor, pero sin pasarnos para no provocar un grano indeseado.
Iluminación navideña
El árbol navideño y los belenes son otro de los elementos que nos encontraremos. Para
fotografiar árboles lo mejor será hacerlo desde una
perspectiva de
contrapicado para captarlos en toda su inmensidad. Si el árbol es muy grande lo mejor será hacer un plano general, mientras que, si por el contrario es un pequeño árbol, quizá es mejor idea captar algunos detalles sueltos.
Para los pequeños detalles, un
diafragma abierto (1.4 por ejemplo), nos permitirá crear una imagen llena de calidez y sutileza. El mismo consejo se pude aplicar a los belenes. Como estos elementos tienen casi siempre luces, lo mejor será fotografiarlos cuando el sol se haya puesto. A ellos también se puede aplicar los consejos anteriores que os hemos dado con la
iluminación: será una combinación de dos elementos, que con paciencia y práctica veréis que dan resultados ¡espectaculares!