¿Está lloviendo? Sí, y aún así nos vamos a la calle con la cámara de fotos para capturar fotos que incorporan un
romanticismo innato que nos hacen sentir melancolía y pensar en que el mayor placer que existe en el mundo al final del día es taparse con una mantita en el
sofá mientras sentimos las gotas de
lluvia caer, fuera.
El fotógrafo ruso con base en San Petersburgo,
Eduard Gordeev, capta fotos de paisajes urbanos en los que la lluvia goza de todo el
protagonismo. Las gotas de agua que fluyen difuminan los colores y la luz difusa, dando lugar a imágenes que semejan ser pinturas
impresionistas de principios del siglo XX.
Aunque la
serie fotográfica que presenta ha sido tomada, en su mayoría, en San Petersburgo, también nos ofrece
fotografías de otras ciudades fácilmente reconocibles como Lisboa. Como puedes comprobar, aquí la lluvia no tiene nada de triste o de
sombrío, sino que se trata del puro romanticismo ruso. Ya estás deseando que llueva, ¿verdad? Yo sí!!!