Una mirada personal. Eso es lo que a menudo hace que a un
fotógrafo destacar por encima de los demás. Seguramente también eso es lo que nos hace fijarnos en el trabajo de la fotógrafa de origen
alemán pero residente en Londres
Julia Fullerton-Batten. Esta
artista acaba de presentar un proyecto fotográfico más que interesante: se llama "Feral Children" y retrata a
niños que crecen bajo
circunstancias inusuales.
Esta fotógrafa saltó a la fama tras publicar la serie
fotográfica "Historias de adolescentes" en 2005, un trabajo que exploraba la transición de una niña a mujer. Ahora nos trae casos de niños que se pierden o que han sido descuidados por sus padres. Ha conseguido documentar casos en cuatro de los cinco
continentes. Recordamos que son historias reales.
La primera foto es el caso de Oxana Malaya, de Ucrania, que fue encontrada en 1991 viviendo con
perros. Tenía 8 años y había vivido con los canes durante 6 años. Sus padres eran alcóhilicos y una noche la dejaron a la intemperie. En busca de cobijo, se metió en una granja de perros y eso fue lo que probablemente le salvó la vida.
Esta foto cuenta la historia de Prava, un niño ruso de siete años que fue encontrado en un apartamento de dos
habitacionesen 2008, viviendo con su madre, quien lo confinó en un cuarto lleno de jaulas de
pájaros. La mujer trataba a su hijo como una mascota más.
La última imagen que os traemos representa a Madina, una niña rusa que vivía con perros desde que tenía 3 años, compartiendo su comida, sus horas de juegos y sus horas de
sueño con ellos. Cuando los
trabajadores sociales la encontraron en 2013, estaba desnuda y andaba a cuatro patas como un perro.